VI Jornadas de BiblioMadSalud: Ciencia Conectada: Salud y Conocimiento

 

La sextas jornadas de la Asociación BiblioMadSalud se han celebrado en otoño (13 de noviembre de 2024) en su ya habitual sede del Colegio de Médicos de Madrid, en las cercanías de Atocha y el Museo Reina Sofía. En esta ocasión se puso el énfasis en la divulgación de la ciencia en abierto a través de tres mesas consecutivas: una sobre divulgación científica, otra sobre ciencia ciudadana y una tercera sobre el papel de las bibliotecas en la ciencia abierta. Tres palabras vinieron a concentrar la mayoría de las intervenciones (divulgación, ciudadanía y abierta) como calificativos al tema central del evento: Ciencia.

La primera mesa, titulada “Divulgación científica. ¿Cómo lo contamos?”, contó con la participación del responsable de comunicación de la Clínica de Navarra (Marcos del Pozo), el redactor jefe de The Conversation España (Pablo Colado), el médico divulgador  y la responsable de comunicación del ICOMEM (Mariló de Hoyos)s (comunicación ICOMEM) y (comunicación Clínica de Navarra), siendo moderada por el director de la biblioteca de la Facultad de Enfermería de la Universidad Complutense -Oliver Martín). En ella se habló de los elementos de la comunicación (emisor, mensaje y receptor), del investigador como generador de contenidos, de la sociedad como receptora de los mismos, del propio mensaje (los resultados de la investigación y las publicaciones científicas), pero también del papel de los periodistas como divulgadores para que el lenguaje especializado de la ciencia llegue más fácilmente a la ciudadanía, y de las bibliotecas, como guardianas del conocimiento y seleccionadoras de los recursos más relevantes. Pero también se habló del creciente protagonismo de los ciudadanos no como consumidores últimos de la ciencia sino también como generadores (ciencia ciudadana). Y surgieron temas de interés como la saturación de la información y el reto de información de forma veraz y con calidad, donde se cruzan dos responsabilidades, la del divulgador pero también del receptor, que debe valorar y utilizar correctamente esa información y evitar la propagación de bulos y desinformaciones.

La segunda mesa estuvo moderada por la exdirectora de la Biblioteca Nacional de Ciencias de la Salud (Elena Primo) y, bajo el título de “Ciencia Abierta. Ciencia Ciudadana”, contó con la participación de Rosa Gallego (Universidad de Alcalá), Pablo Camacho (Observatorio de Ciencia Ciudadana de FECYT), Beatriz Núñez (Proyecto Urbanome) y Jessica Gil (Proyecto Micromundo). Tuvieron como reto definir lo que se entiende por ciencia ciudadana, llegándose a la conclusión de que se trata de la participación activa de los ciudadanos, esto es, de los “no-científicos”. Quedó patente su crecimiento reciente y constante, revelando el interés de la ciudadanía por consumir y transmitir ciencia, lo que todos recalcaron como algo tremendamente positivo. Así fue corroborado por los diferentes proyectos ciudadanos que se fueron presentando, que contaron con una mayoría participación de ciudadanos jóvenes y suponen un ilusionante camino para mejorar la sociedad y hacerla más saludable.

Por último, la tercera mesa (“Bilbiotecas y Ciencia Abierta”) abordó los temas de las mesas anteriores pero recalcando el papel de los profesionales de las bibliotecas en la transmisión y divulgación de la ciencia. Estuvo moderada por la subdirectora de la Biblioteca de la Universidad de Alcalá de Henares (Maribel Domínguez) y en ella intervinieron  la directora de la Biblioteca de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Madrid (Candelas Gil), el bibliotecario de la UNED Alexis Moreno), la responsable de la Unidad de Acceso Abierto de la FECYT (Laura Bonora) y Eva Ortiz (Ciencia Abierta de la Universidad Carlos III).Todos ellos insistieron en la relevancia de las bibliotecas en la visibilidad y difusión de la ciencia abierta, hablándose en el camino de recursos de información como bases de datos y repositorios, de métricas e indicadores de uso, de metadatos, de los portales del investigador y de perfiles de autores. Pero también se recalcó el fundamental rol de las bibliotecas de salud en la ayuda a los investigadores en la búsqueda de información, en el asesoramiento y en la identificación de indicadores curriculares.